domingo, 30 de marzo de 2008

Que pena.

Es vergonzoso.
Pero a nadie se le va a caer la cara de la misma, puesto que no creo que la tenga...(la vergüenza, digo).
Triste final para la muchachita onubense, victima de un monstruo, por llamarle de alguna forma que estaba en la calle gracias a la ineptitud de nuestro sistema judicial, encabezado por un juez que se escuda en una falsa baja laboral de una funcionaria para justificar que el tipo este siguiera en la calle, presentándose a un juzgado cada quince días y sin que nadie se diera cuenta de que el tipejo este tenía una condena firme por abusos a una de sus hijas.

Al tío este...además se le protege...se le protege en prisión manteniéndole apartado de los demás presos.
¿Por qué?....Por " su seguridad" dicen.
¿Su seguridad?...¡¡¡Pero que cojones su seguridad!!!...que se lo dejen a los otros internos...que se lo dejen...
Dejadle mezclarse con los otros...dejadle...se lo merece.
Se merece cualquier cosa que le pase, a él y al juez mentiroso que ha permitido que una niña de cinco años muera por su ineptitud.

¿Acaso no es ésto un homicidio consentido?
Consentido por el sistema, consentido por la burocracia, consentido por el maremágnum de papeles e impresos entre los que se desenvuelven los putos funcionarios.

Ahora, ZP llama al padre para decirle que "se llegará donde haga falta"...ahora, hora que éstos padres ya no tienen a su hija.

Casi cualquiera que sea padre sabrá a lo que me refiero.
¿Para qué cojones llama ZP ahora?
Mejor sería que le llamara cuando el tipo este se hubiera llevado su merecido...mejor que llamara para decirle que el juez que ha permitido la muerte de su hija ya no ejerce como tal, que se le ha retirado de la carrera judicial, que se le ha encausado por incitación al homicidio...porque esto ha sido eso...lo que ha hecho este juez ha sido decirle al tío este..."Tienes las manos libres para seguir haciendo daño"...¿O no?.

Pero me temo que esto no va a ser así...me temo que el juez seguirá ejerciendo y que seguirá haciendo lo que hasta ahora.

Después de los "toques" de atención que ha recibido su juzgado por la lentitud en las tramitaciones, aquí todo va a seguir igual...bueno, igual no...porque unos padres onubenses ya no tendrán la sonrisa de su hija.


Que pena me ha dado.

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