
A ésta gentuza, hay que dejarla enmedio del patio de la prisión.
O mejor, que me los dejen a mí, que le iba a aplicar yo el artículo 25a, párrafo 3 de mi propia ley personal.
No le iba a matar, pero me lo pediría con el tiempo.
La carcel, e incluso la muerte, es poco castigo para CUALQUIERA que haga daño a un niño.
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