La publicidad.

Que invento.
A veces, uno se queda maravillado de lo que se puede hacer en los 20 segundos que dura un anuncio en tv.
Basten como ejemplos los anuncios de la lotería primitiva con el perro Pancho como protagonista, con el calvo de la lotería de navidad; los de Audi, o VW, normalmente son son dignos de verse y a veces, ser admirados.

Hay mas, que ahora mismo no me vienen a la mente, pero también existe un lado oscuro, chabacano y vomitivo de la publi.
Léase:
Cualquier anuncio de compresas en las que es condición "sine qua non" menear el culo de forma antinatural, enseñándoselo a la cámara y por supuesto vestir minifalda, a la vez que sentirse la mujer mas feliz del mundo por tener la regla, lo que no sé que es por ser hombre, pero debe ser un coñazo que te cagas.

Los de detergentes/lavaloquesea con "oxiacsion troposferico ultra full power cenital espurgante con esferas redundantes pink floyd" en las que la condición es que salga una "maruja" y/o famosa venida a menos, hablándonos de las supuestas bondades del limpiador/quitañordas en cuestión. En estos anuncios, es condición indispensable el haber cocinado paella o algo asado y además, ser un guarro/guarra.

Porque no me digas que no hay que ser cerdo de cojones para tener el lavabo, el suelo, la bañera, el fregadero y/o la taza del váter en esas condiciones.

Si a mi me sale un tío o tía diciéndome que viene del futuro a traerme una lejía le parto la cara.
Si vienes del futuro, tráeme la combinación de la primitiva del jueves hijoputa, no me traigas una lejía.
Luego están los anuncios de telefonía, en la que es condicion indispensable el ser feliz de la muerte, bailar todos juntitos y gritar tu felicidad a los cuatro vientos porque "perteneces" a una de las compañías que te sacan los ojos con sus tarifas.

Y por último, los de las bebidas, yogures y demás zarandajas basadas en la soja, o en los bífidus que te hacer cagar, que por lo que veo es la panacea universal, que según ellos, "todos estabamos esperando".

Hay uno en particular que me toca sobremanera los cojones, en la que una pareja entra en el ascensor y se encuentra a otra discutiendo (lo que es lo mas normal en una pareja), y el tío les suelta la perla de turno "a vosotros lo que os hace falta es desayunar...caga-bran".

Mira...me pone de los nervios.
¿A ti que cojones te importa si cago o no cago o si desayuno "caga-bran" o chocolate con porras?, lo que prefiero, por cierto.

Si yo estoy en un ascensor discutiendo con mi señora esposa y me viene un vecino a decirme que lo que me hace falta es cagar...lo menos que le puede pasar en que le caiga un exabrupto, cuando no un guantazo, primero por metijón y segundo por gilipollas.

Patético.
Y luego están los "tostones".
Los que te saturan con el mismo anuncio cada minuto y medio, sea de lo que sea, y que acabas aborreciendo y cogiendo asco.

Como he dicho, no entiendo de métodos publicitarios, pero hay casos que me llaman la atención y que me hacen aborrecer el producto en cuestión ante la saturación que te meten.

Ejemplos:
La Sexta.
Por las mañanas te meten un anuncio de una web que te busca hoteles mas baratos.
Cada minuto y medio, te aparece en pantalla una tía feliz y contenta, riéndose ella sola en la cama, o un menda gordopilo en una piscina, también feliz y contento por supuesto.

El anuncio en cuestión, tiene además una musiquilla silbante que te hace daño al oído de escucharla tantas veces.
El resultado, al menos para mí, es que mientras veo los documentales matutinos que me gustan por lo demás, en cuanto cortan para publicidad, o quito el sonido, o me piro a otra cadena (normalmente teledeporte), hasta que pasa el infierno publicitario.

No contentos con el anuncio de marras, te atacan igualmente cada dos minutos con otro que supuestamente te va a hacer rico, o casi, vendiéndoles tus teléfonos móviles usados.

Jajajaja...esto si que me hace gracia porque, por curiosidad, me he metido en la web de los mendas estos y te dan por el teléfono unos 2 €, eso si es un buen teléfono.

Jodidamente rico te puedes hacer con 2 €, vamos, que los 4 billetes de 100 pavos que aparecen en el anuncio para pagar la cena sólo los tendrás si dispones de unos 200 teléfonos.

"Tu teléfono puede valer hasta 200 €" dicen.
Eso si es un Iphone 4, o una Blackberry NUEVOS.
No me jodas, rodas, que me incomodas.
Y luego, los ya tan manidos de teletienda...babas de caracol y otras sandeces americanoides.
¡¡¡Pero si en Estados Unidos todavía venden las fregonas en las teletiendas como un invento del futuro, CAWENLAPUTADEOROS!!!.

Potingues milagrosos, aparatos que te harán tener un cuerpo de escándalo en cuestión de minutos, cuchillos que cortan la mantequilla y también clavos de acero, sonotones maravillosos que te harán oír la alarma del horno, asas con ventosas que te harán darte el hostión en cuanto las pongas donde no debes, y demás engañabobos que deben ser rentables, porque si no, no se entiende la inversión publicitaria de las ñordas estas.

Debe costar una pasta gansa poner un anuncio cada minuto y medio en tv.
O eres el dueño de la empresa que vende los productos/milagro, en este caso La Sexta, o las tarifas de La Sexta están tiradas de precio, o lo dicho, lo que vendes a los incautos te compensa la inversión, que por lo que veo, debe ser así.

Lo dicho, no me parece muy inteligente por parte de los publicistas, ni de los anunciantes tal nivel de saturación, porque lo único que consiguen es que el producto te dé verdadero asco.

Pilla por la orilla.